El Cuerpo de Delegados es un colectivo conformado por un número reducido de socios idóneos convocados anualmente por el Directorio para desempeñar el predicamento de autoridad máxima en cada competencia.
En su cometido, el Delegado Oficial debe arbitrar todas las medidas necesarias que tiendan al buen desarrollo del evento, especialmente las que encomiendan los Reglamentos Generales de la Federación Deportiva Nacional del Rodeo Chileno.
Por ejemplo: comprobar que la medialuna y sus instalaciones anexas satisfacen las exigencias técnicas, hacer cumplir la Política y el Manual de Bienestar Animal, constatar la presencia de un Médico Veterinario, revisar las inscripciones genealógicas de los caballares, impedir la actuación de sancionados, verificar el loteo del ganado y el llenado del toril, fiscalizar el atuendo huaso y la presentación de los jinetes, entre muchas otras.
Además, el Reglamento Interno le demanda responsabilidad y criterio en su función, asistencia a las capacitaciones y charlas a las que sea debidamente citado, remitir su cartilla dentro de plazo, evaluar el rodeo oficial completando la planilla respectiva y concurrir a la reunión de Asamblea ordinaria siguiente a la competencia para realizar un informe verbal.